Pedro Expósito.- El CD Castellar Íbero y el Villargordo CF son ya equipos de Segunda División Andaluza a falta de dos jornadas para finalizar el campeonato en Primera División Andaluza. Ambos equipos estaban pendientes de una posible sanción al CD Quesada para salvarse pero ésta situación quedó desbloqueada ayer con el pronunciamiento del Comité de Competición, que desestimó la presunta alineación indebida de los quesadeños, dejando sin vida tanto a castellariegos como a villagordeños.
El paso por la máxima categoría del CD Castellar Íbero ha sido por tanto breve. Solo una temporada, la de su debut, ha aguantado el equipo que preside Calixto Alcázar y dirige Antonio Climent. Una campaña cargada de adversidades, bajas, lesiones, sanciones y problemas que han desembocado en que el equipo, por unas cosas y por otras, no haya encontrado la regularidad necesaria para salvarse.
Tras ascender como el mejor tercero de ambos grupos de Segunda Andaluza, el equipo verdiblanco vuelve a Segunda Andaluza, categoría en la que celebrará su tercer año de vida. Sus números en Primera División Andaluza, a falta de una jornada para ellos – descansa esta semana – dicen que a día de hoy el CD Castellar Íbero ha jugado 31 partidos de los que ha vencido en cinco ocasiones, empatado siete y caído derrotado en diecinueve, estando en estos momentos con 22 puntos, ocho por debajo de la salvación y penúltimo clasificado.
En el Villargordo CF el descenso era una cosa que se barruntaba desde la salida de Tete Badillo de su banquillo y el serial de idas y venidas de jugadores que finalmente ha tumbado al club. Últimos, a dos jornadas para finalizar, este club que preside el ilustre Juan Antonio Cañas lo ha intentado todo, sin embargo ni Vicente Navarro ni los nuevos futbolistas que han llegado ha dado con la tecla en una campaña que quedará en el recuerdo por lo complicada que fue, siendo también en la que quedaron subcampeones de la Copa Presidente de la Diputación.
En la jornada 20 el equipo se encontraba con un colchón de diez puntos sobre el descenso, sin embargo una racha de doce derrotas consecutivas han llevado a los villagordeños a ocupar el farolillo rojo a nueve puntos de la zona de permanencia. Demasiada losa para un club que se salvó la temporada pasada por dos puntos con David Vidal y Jesús Monterroso en su banquillo.