Oscar A. Martínez.- Son muchos los escritos que encontramos sobre esta comparativa, en la mayoría de ellos podemos leer acerca de céspedes artificiales sin mantenimiento, cosa esta absolutamente errónea.
Este es un breve resumen del costo final de un campo de césped natural, comparado con uno de césped artificial:
Instalación.
La instalación de un buen césped requiere movimientos de tierras e instalación de red de riego, tanto para el natural como para el artificial, que están, según mercado (y considerando las posibles diferencias entre céspedes de alto presupuesto y los más modestos) de unos 14€/m2 para el natural, y unos 20€/m2 para el artificial, considerando la capa de bituminosos sobre la que se instala.
Por otro lado está el precio del propio césped, que va desde los 5 €/m2 de un césped natural estándar hasta los 55 €/m2 del césped artificial homologado más batato.
De aquí deducimos que instalar un campo de césped natural de una Ha (10.000 m2) costaría 14+5 =19€/m2 X 10.000 = 190.000 €
La instalación del césped artificial tendría un coste de 20+55=75 €/m2 X 10.000= 750.000 €
Mantenimiento.
El mantenimiento de un césped tipo medio requiere la concurrencia de 2 personas anuales para un correcto mantenimiento, con un coste de 48.000 € anuales aproximadamente más la necesidad de un técnico (otros 7000 € anuales), un total de costos de personal de 67.000 € anuales, si bien el artificial reduce considerablemente el costo a 0.3 personas anuales que implican 8.400 € anuales.
La Ha de césped natural requiere unos 15.000 € anuales en abonados, fitosanitarios, resembrados y recebados, que el césped artificial, con la única excepción de los recebados de caucho o arena, reduce considerablemente a unos 3.000 €
El césped natural es previsible (nunca se hace en céspedes modestos, pero es lo previsible) que se renueve a los cinco años, mientras que el artificial solo se hace cada 10, es decir, cuando acaba la vida útil del artificial hemos gastado de nuevo los 50.000 € de renovación del natural (ya no hay movimiento de tierras ni instalación de riego, solo instalación de tepes).
Conclusiones.
Resumiendo los costes directos de instalación son de 244.000 € para el césped natural y de 761.400 para el artificial. Hasta aquí viene ganando el natural por goleada.
Ahora vienen los años de mantenimiento puro, en los que el natural conlleva un gasto de 83.000 € mientras que el artificial es de solo 11.400, aquí ya el artificial es el que manda… si consideramos los diez años de vida útil del artificial, las cifras son de 540.000 para el natural contra 114.000 para el artificial.
Si además consideramos que al quinto año renovamos totalmente nuestro césped, en esos 10 años costará de nuevo los 50.000 € más que el artificial.
En diez años los costes totales son de 190.000 + (83.000 X 10)+ 50.000= 1.070.000 € para el césped natural y de 750.000 + (11.400 X10) = 864.000 €
Hasta aquí hemos ahorrado 206.000 en diez años, es decir, 20.600 euros al año con el césped artificial, pero, y aquí está una de las claves, al trascurrir esos 10 años volvemos a renovar el césped. Esta vez no hay que volver a hacer los movimientos de tierras ni la instalación de riego, por lo que solo hablamos del costo del tapete, que es de 50.000 € en el caso del césped natural y de 550.000 € en caso del artificial, con esos 500.000 euros de diferencia pagamos con creces el déficit de 206.000 € referidos antes.
Imaginemos el extremo de que no instalamos un césped homologado FIFA y nos gastamos “solo” 40€/m2 en el césped artificial… entonces los datos anteriores quedan en que el artificial nos habrá costado 600.000 y su renovación 400.000, con lo que la renovación nos deja un saldo favorable al natural de 350.000 € y la primera instalación y mantenimiento un saldo favorable al artificial de 70.000 €. En este caso habremos ahorrado la cantidad de 7.000 € al año con el césped artificial, pero aquí se suman varias preguntas:
¿Aguantará un césped NO FIFA los 10 años referidos?
¿Compensará el gasto en dos puestos de trabajo más un técnico contra un trabajador a tiempo parcial a cambio de esos 7.000 € al año?
Bien es verdad que a la decisión hay que sumarle otras dos consideraciones: la primera es beneficiosa para el césped artificial y es el rendimiento que se le puede dar, con varios partidos diarios y sin periodo de descanso con mala climatología.
A esa consideración hay que añadirle otra, en este caso a favor del natural, cuya Hectárea es un sumidero de 2 Tm de CO2 anuales contra la emisión de una cantidad similar en el procesamiento del plástico.
Oscar A. Martínez Gaitán
Ingeniero técnico Agrícola.
Groundsman & Greenkeeper
Asesor R.O.P.O. JUNTA DE ANDALUCÍA Nº 23/134/AS
CONFORME AL R.D. 1311/2012BDE 14 DE SEPTIEMBRE