OPINIÓN | Pedro Expósito.- Tomar la decisión de destituir a tu entrenador no debe ser fácil pero debe ser reconfortante a día de hoy si eres parte de la Junta Directiva del Ibros CF. A posteriori es fácil opinar pero sin lugar a dudas esa decisión, ahora con datos, fue totalmente acertada fuera más o menos dolorosa, algo que el que escribe desconoce.
La salida de Pedro López y la inminente llegada de Ángel Gálvez desde luego le ha salido de perlas a un Ibros CF que, desde entonces, no ha parado de sumar. De hecho ha ganado ya cinco encuentros en cinco partidos el conjunto verdiblanco con el técnico de Linares, algo que ha hecho que el equipo haya terminado la primera vuelta en zona de playoff de ascenso a Primera Andaluza.
Si recapitulamos nos encontramos a un Ibros que al término de la pasada campaña jugaba por salvarse, sabiendo que dependía de que también lo hicieran los equipos jiennense de División de Honor. Un principio de desidia que finalizaba este verano cuando se procedió al cambio de directiva y un cambio casi radical en el proyecto que arrancaba prácticamente de cero desde la Segunda Andaluza.
Pedro López era el elegido y con apenas los dedos de una mano se podían contar los jugadores que renovaban con respecto a la pasada campaña. Los inicios no pudieron ser más duros, no sacando nada más que dos puntos en seis jornadas, en las que sacó dos empates y tres derrotas descansando una semana. El Ibros CF antepenúltimo.
Este inicio dio paso a la toma de una decisión, destituir a Pedro López y hacerse con un técnico de reputada fama y éxito como lo es Ángel Gálvez. Desde entonces todo ha cambiado en el club verdiblanco, al que además se han unido jugadores de la talla de Santiago, Bombi, Ochoa y Chaquetas, algo que ha dado un salto de calidad general.
En su primer partido al mando ya se ganaba por goleada, cinco a uno, ante el colista Baños, un resultado que dio confianza, al igual que la subió ganar lejos de casa en un complicado partido en Guarromán.
El siguiente partido en casa fue para de nuevo deleitar a su afición con un cuatro a cero al Campillo y de nuevo lejos de casa se imponía siendo muy superior al Atlético Arjonilla. Puedo dar fe de ello puesto que pasé demasiado frio en la grada del San Roque y no fue solo por la climatología.
A estas alturas el Ibros CF llegó con la confianza plena al nuevo envite en casa que también supo sacar adelante ante un CD Jabalquinto ante el que se jugaba la cotizada quinta plaza, siendo este rival el verdadero equipo revelación del grupo. A los datos me remito.
Tras estas cinco victorias de cinco partidos al Ibros de Ángel Gálvez se le viene ahora toda una segunda vuelta en la que el objetivo es terminar entre los cinco primeros, un reto que no se prevé fácil como tampoco lo va a ser regresar a la Primera Andaluza Jaén, el verdadero sueño de la Junta Directiva que hace poco más de un mes tuvo que tomar una decisión que solo el tiempo dirá si realmente fue acertada o no.