Pedro Expósito.- La historia del fútbol en la ciudad de Andújar no se rinde a la existencia de un solo equipo que llegara a hacer grandes cosas como lo fue el Iliturgi, en sus diferentes denominaciones, también convivieron con otros como el Andújar Lielsa que a finales de los 70 conseguiría levantar un trofeo de gran relevancia como lo es la Copa Gobernador.
También en la ciudad de Linares existía otro equipo que llegaría lejos esa temporada, el San José CF, finalista de esa copa que se celebraría el domingo 21 de julio sobre la hierba natural del viejo Estadio de la Victoria.
En el corazón de la capital del Santo Reino estos dos equipos se batieron el cobre en un duelo espectacular que fue toda una fiesta de nuestro futbol.
Los andujareños cogían el testigo en una final de sus vecinos del Iliturgi, que habían perdido tres finales seguidas en las ediciones de 1976, 1977 y 1978, y se plantaban en la final con un equipo compuesto por Andújar Lielsa: Navarro; Herrera (Juanjo), Diego, Guerrero; Bastante, Figueras; Suárez (Pedro), Girón, Garzón, Gascón y Adolfo.
Por la parte linarense actuaron Antonio; Hervás, Pedro (Monchi), Marín; Angelines, Miguelín; Fernando, Fernández (Mínguez), Ángel, Rubio y Bravo; en un duelo que pitaría Alcázar García, un árbitro que no sale muy bien parado en las crónicas de la época por su actuación en esta final.
De hecho de penalti, muy discutido por el bando de Linares, iba a llegar el primer gol del conjunto andujareño, que hasta entonces estaba dominando pero sin crear peligro al portero rival, muy inseguro. Gascón era el encargado de asumir la responsabilidad de lanzar esa pena máxima para poner el uno a cero.
El Andújar Lielsa mantuvo el ritmo mientras que el San José esperaba a la contra – el mundo al revés – dándole frutos esto tras coger el balón Rubio irse de tres rivales y servir a Bravo para que este estableciera el empate a uno. Así se iba a llegar al descanso de esta emocionante final.
Solo ocho minutos del segundo acto necesitó el Andújar Lielsa para adelantarse en el marcador. Adolfo, en jugada personal por la izquierda, centraba la pelota para que Girón mandara a la red. Bravo, el hombre que había firmado el uno a uno para el Linares, pudo volver a nivelar el partido sin embargo no contó con acierto frente a Navarro.
Girón, inspirado ese día, anotaría el tres a uno que decantaría la balanza del lado isturgitano tras recibir un balón en la frontal, zafarse de dos contrarios y disparar con éxito ante la meta de Hervás.
A tres minutos del final Navarro, el meta de los de Andújar, cometía un penalti que Miguelín convertía en el tres a dos final.
El Andújar conseguiría una temporada después alzarse campeón de la Primera Regional Jiennense superando a clubs como el Jódar CF, CD Vilches, CD Útica, Torredonjimeno CF o CD Villanueva entre otros.
Por entonces esa categoría era la más alta a nivel provincial puesto que la Regional Preferente hasta la temporada 1986-87 englobaba conjuntos de Granada, Almería y Córdoba. En aquella primera Regional Preferente solo de equipos jiennenses, el Andújar participaría de ella, coincidiendo con el Iliturgi CF, equipo que finalmente levantó el trofeo de campeón con Gregorio Manzano como entrenador.